Realizar una reforma puede ser una experiencia emocionante, pero también estresante si no se planifica correctamente. Muchos propietarios cometen los mismos errores, lo que puede traducirse en retrasos, sobrecostes y resultados insatisfactorios. En este artículo te mostramos los 7 errores más comunes en reformas y cómo puedes evitarlos para que todo salga según lo previsto.
1. No definir bien el presupuesto
Uno de los errores más frecuentes es no establecer un presupuesto realista y cerrado. Muchas veces se empieza con una idea vaga del coste total y se van sumando extras durante la obra.
¿Cómo evitarlo?
- Haz una estimación inicial realista y añade un 10-15% extra para imprevistos.
- Solicita varios presupuestos detallados y por escrito.
- Asegúrate de que todo esté especificado: materiales, mano de obra, licencias, etc.
2. No contratar a profesionales cualificados
Ahorrar eligiendo mano de obra no profesional puede salir caro. Reformar una vivienda requiere conocimiento técnico y experiencia.
¿Cómo evitarlo?
- Contrata empresas o autónomos con referencias y experiencia contrastada.
- Verifica que estén dados de alta y tengan seguro de responsabilidad civil.
- Firma siempre un contrato antes de empezar.
3. Cambiar ideas constantemente
Modificar la reforma una vez iniciada es otro gran error. Cada cambio supone retrasos, más costes y puede afectar a la calidad del resultado final.
¿Cómo evitarlo?
- Dedica tiempo a la fase de diseño y planificación antes de empezar.
- Asegúrate de estar conforme con los planos, materiales y distribución.
- Confía en el criterio del profesional que te asesora.
4. No tener en cuenta las licencias y normativas
Muchas personas inician reformas sin consultar si necesitan licencias de obra, permisos o comunicados al ayuntamiento. Esto puede acarrear sanciones o la obligación de deshacer lo hecho.
¿Cómo evitarlo?
- Infórmate en tu ayuntamiento o deja que tu reformista gestione los permisos.
- Para reformas integrales, suele ser necesario un proyecto técnico y una licencia mayor.
- No asumas que “por ser interior” no necesitas permisos.
5. Comprar materiales por tu cuenta sin asesoramiento
Algunas personas compran los materiales por su cuenta para ahorrar, pero eligen mal o se quedan cortos, lo que puede provocar retrasos y problemas de compatibilidad.
¿Cómo evitarlo?
- Déjate asesorar por el profesional sobre calidades, cantidades y compatibilidades.
- Si compras tú mismo, asegúrate de conocer las medidas exactas y ten siempre un margen de sobra.
6. No prever el impacto en tu día a día
Una reforma puede afectar profundamente a tu rutina: ruidos, polvo, cortes de agua o luz… Y muchas personas no lo tienen en cuenta.
¿Cómo evitarlo?
- Si la reforma es integral, considera vivir temporalmente en otro lugar.
- Establece un calendario realista con días clave (inicio, final, entregas).
- Mantén una comunicación constante con el equipo de obra.
7. No planificar el orden correcto de los trabajos
Pintar antes de terminar la fontanería o instalar suelos antes de terminar la electricidad son errores comunes de planificación.
¿Cómo evitarlo?
- Deja que la dirección de obra coordine los oficios.
- Asegúrate de seguir un orden lógico: demoliciones → instalaciones → acabados.
- No intentes “ahorrar tiempo” solapando tareas que deben ir por fases.
Conclusión
Evitar estos errores es clave para que tu reforma sea un éxito. Planificación, asesoramiento profesional y una buena comunicación son tus mejores aliados. Recuerda: una reforma bien hecha mejora tu hogar, pero también tu bienestar.